Intención para el mes de junio
Sagrado Corazón de Jesús |
CIUDAD DEL VATICANO, domingo 29 de mayo de 2011 (ZENIT.org).– En este mes de junio, Benedicto XVI pide en particular oraciones por los sacerdotes para que sean testigos auténticos del amor de Dios.
Esta es la propuesta que hace en las intenciones de oración, contenidas en la carta pontificia que ha confiado al Apostolado de la Oración, iniciativa que siguen casi 50 millones de personas en los cinco continentes.
La intención general dice: “Para que los sacerdotes, unidos al Corazón de Cristo, siempre sean verdaderos testigos del amor solícito y misericordioso de Dios”.
Esta petición del papa tiene lugar cuando se cumple un año de la clausura del año sacerdotal, período en el que la Iglesia se unió de manera particular en oración por sus sacerdotes en medio de escándalos de una pequeñísima parte de ellos, que sin embargo ha acarreado un grave perjuicio en la percepción de su vocación por parte de la opinión pública.
El papa propone también una intención misionera, que en el mes de junio es: “Para que el Espíritu Santo haga surgir en nuestras comunidades numerosas vocaciones misioneras, dispuestas a consagrarse plenamente a difundir el Reino de Dios”.
Las Doce Promesas del Sagrado Corazón
En mayo de 1673, el Corazón de Jesús le dio a Santa Margarita María para aquellas almas devotas a su Corazón las siguientes promesas:
* Les daré todas las gracias necesarias para su estado de vida.
* Les daré paz a sus familias.
* Las consolaré en todas sus penas.
* Seré su refugio durante la vida y sobre todo a la hora de la muerte.
* Derramaré abundantes bendiciones en todas sus empresas.
* Los pecadores encontrarán en mi Corazón un océano de misericordia.
* Las almas tibias se volverán fervorosas.
* Las almas fervorosas harán rápidos progresos en la perfección.
* Bendeciré las casas donde mi imagen sea expuesta y venerada.
* Otorgaré a aquellos que se ocupan de la salvación de las almas el don de mover los corazones más endurecidos.
* Grabaré para siempre en mi Corazón los nombres de aquellos que propaguen esta devoción.
* Yo te prometo, en la excesiva misericordia de mi Corazón, que su amor omnipotente concederá a todos aquellos que comulguen nueve Primeros Viernes de mes seguidos, la gracia de la penitencia final: No morirán en desgracia mía, ni sin recibir sus Sacramentos, y mi Corazón divino será su refugio en aquél último momento.
Viernes 3 de junio (1° viernes de mes) Misa en parroquia: 08,00hs.