Aquí queremos contarles algunas de las tantas actividades que se fueron desarrollando durante todo el mes de septiembre; son momentos en que Dios ha querido mostrarnos, una vez más, su gran amor con su presencia real en medio nuestro. Que en todo lo que vivimos cada día, podamos reconocer la presencia del Padre y permanezcamos unidos a Él, para experimentar la verdadera paz que sólo viene de nuestra unión con Dios y, en Él, con los hermanos.
ENTREGA DE BIBLIAS
T
ambién en el mes de la Biblia, los niños de catequesis la
recibieron de manos de nuestro párroco, el padre Agustín Villa. Aquí las
imágenes de los niños con su familia en torno al Altar del Señor para recibir
su Palabra. Leer la Biblia es conocer un poco más el Corazón de Jesús. No se
trata de leer un libro como cualquier otro, porque la Palabra de Dios, aunque
sea la misma, siempre nos dice algo diferente, dependiendo de nuestro estado de
vida, lo que necesitamos, lo que buscamos, Jesús quiere hablarnos, enseñarnos y
lo hace por medio de los distintos libros que conforman las Sagradas
Escrituras, las cuales han sido inspiradas por Dios. La Biblia y la tradición
de la Iglesia, no son opiniones, sino las enseñanzas de nuestro Padre Dios, que
por medio de la Iglesia son transmitidas a todos los hombres del mundo entero.
CONSAGRACIÓN A MARÍA
En la visperas de la Fiesta del "cumpleaños de la madre de Dios",de
la Virgen Maria los chicos de 1er. año de comunión en la misa de 11
hs. del domingo 7 de septiembre, hicieron su CONSAGRACION A LA VIRGEN. La liturgia
lo celebra porque su nacimiento fue esperanza y aurora de salvación y
toda fiesta mariana es glorificación de Jesús. Como recordatorio de
este momento especial, de amor a nuestra Madre los niños y niñas
recibieron una medalla de la Virgen Niña.
Siguiendo con las celebraciones en torno a la fiesta de la Natividad de la Sma. Virgen, la Legión de María festejó sus 93 años de vida. Las legionarias de nuestra parroquia realizaron la renovación de su consagración a la Sma. Virgen, aquí también lo hicieron otros miembros de la comunidad parroquial, que aceptando esta invitación de entregarse por completo a la Madre de Dios, se fueron preparando durante 33 días con el método de oración de San Luis María Grignion de Montfort.
SOY TODO TUYO REINA MÍA, MADRE MÍA Y CUANTO TENGO TUYO ES!
BENDICIÓN DE LA CRUZ
El domingo 28 de septiembre, nuestro Obispo Mons. Oscar, durante la santa Misa de las
19hs., bendijo la nueva Cruz de nuestra parroquia. Damos gracias a Dios por
esta bellísima imagen de Cristo crucificado que ha sido donada para nuestro
templo parroquial. Que al mirar la cruz y en ella a nuestro Adorable Redentor,
sintamos el deseo de vivir cada vez más cerca de sus enseñanzas y poder
experimentar ese amor inmenso que nos fortalece, nos anima, nos purifica y nos
eleva, con su gracia, a la Misericordia de nuestro
Padre Celestial.
"La Cruz es el emblema de Redentor": allí
está nuestra salud, nuestra vida y nuestra resurrección. San Josemaría Escrivá
de Balaguer, en la II estación del Vía Crucis, recuerda las palabras de Cristo:
"Si alguno quiere venir en pos de mí, niéguese a sí mismo, lleve su cruz
de cada día y sígame".
La Cruz cada día. Nulla dies sine cruce!, ningún
día sin cruz!: ninguna jornada, en la que no carguemos con la Cruz del Señor,
en la que no aceptemos su yugo. Por eso, no he querido tampoco dejar de
recordarles que la alegría de la resurrección es consecuencia del dolor de la
Cruz. El camino de nuestra santificación pasa, cotidianamente, por la cruz no
es desgraciado ese camino, porque Cristo mismo nos ayuda y con Él no cabe la
tristeza.
"La cruz es también el misterio de nuestra
confianza y de nuestra grandeza, porque Cristo ha querido llevar en ella
nuestra pequeñez, nuestra debilidad, nuestra pobreza, nuestro dolor y nuestras
lágrimas".
